La intervención se hace en las cuatro veredas y cordones de la confluencia de calles Sarmiento y Tucumán.
De esta manera, se continúa trabajando en favor de la accesibilidad, inclusión, seguridad y la sana convivencia, desde los desafíos que nos presentan las personas con diferentes discapacidades.
Cabe mencionar además que las barreras arquitectónicas afectan también a otras personas como los adultos mayores o aquellas con prótesis porque necesitan contar con accesos que les permitan desplazarse sin dificultades.