La ministra presentó una resolución que ofrece un gran margen de discrecionalidad a los agentes para disparar balas de plomo ante lo que consideren un "peligro inminente". "No queremos más casos Chocobar en lo que se esté discutiendo si hizo las cosas mal o no", dijo.
Las fuerzas federales, según anunció la funcionaria, estarán habilitadas a usar armas de fuego "cuando haya un peligro inminente de muerte del propio agente o de ciudadanos que estén en peligro frente a un ataque de criminales" o para "impedir la comisión de un delito, cuando sea un delito grave que ponga en riesgo la integridad física de las personas".
Los miembros de las fuerzas también estarán habilitados a usar armas para "detener a un delincuente cuando oponga resistencia a la autoridad o para impedir que se fugue", precisó. "Esto es muy importante porque siempre se plantea que el delito se termina en el momento en que aparentemente el delincuente se fuga. No es lo que dicen nuestros códigos. El Código Penal es claro: obliga a las fuerzas de seguridad a impedir la fuga de los delincuentes", agregó Bullrich.